Dado que vivimos en una cultura temerosa, obsesionada por la supervivencia (El 99% de nuestros miedos son imaginarios y lo más probable es que no se cumplan nunca) estamos acostumbrados a hacer las preguntas equivocadas. Tendemos a abordar cualquier situación difícil con la pregunta básica ¿qué está mal? Hay una pregunta mejor: ¿Qué está bien?
Enfocar tu mente en pensamientos positivos será mucho más rápido y eficaz. En donde enfocas tu atención, enfocas tu energía y donde enfocas tu energía esto crece.
1. Descubrimiento. La identificación de aquellos procesos que funcionan bien. Esta es la fase en que la persona identifica sus mejores cualidades, las que le han servido más en el pasado. Las preguntas pueden incluir desde “Qué hago mejor?/ ¿En qué soy más bueno?” hasta “¿Qué hice en el pasado para resolver una situación similar?”
2. Sueño. Se trata de visualizar los procesos que funcionarán bien en el futuro. Esta es la fase en que la persona imagina o ve posibilidades. Entre las preguntas podrían estar “Qué es lo mejor que podría resultar de este problema?” o “Quién podría ayudarme?”.
3. Diseño. Planificar y priorizar aquellos procesos que podrían funcionar bien. Esta es la fase en la que la persona traza un plan o curso de la acción. La pregunta podría ser “Por dónde es mejor comenzar?” o “¿cuánto tiempo me llevará lograrlo?”
4. Entrega. Es la implementación, la ejecución del diseño propuesto. Esta es la fase de la acción. En esta fase las mejores preguntas podrían ser “Qué es lo primero que necesito hacer?”, “Y a continuación?” o “¿Cuál es el paso final?”
Hay muchas preguntas constructivas para cada fase; pero el elemento esencial es el mismo: que las preguntas sean constructivas. Esto impide que l miedo obnubile la mente y señala el camino hacia soluciones. Cada pregunta que hagas te llevará o bien a la oscuridad o bien a la luz.
Cuando reconocemos nuestras fortalezas, basadas en las mejores prácticas, y anticipamos un futuro brillante, somos mucho más efectivos que cuando nos fijamos en las debilidades.
La Indagación Apreciativa es una metodología de diálogo y visualización que permite ver a las organizaciones (y a sus miembros) como entes vivos, llenos de energía y potencialidad, y con innumerables imágenes e historias positivas sobre las cuales construir el futuro. Esta técnica lleva a las personas a enfocarse en lo que sucede cuando las cosas están en su óptimo nivel.
"Hacer efectivas las fortalezas de la gente e irrelevantes sus debilidades." (Peter Drucker)
Esta metodología se está aplicando ampliamente en organizaciones de diverso tipo, porque ha probado arrojar resultados impactantes en la mejora de todo tipo de procesos. Una de las ventajas más destacables es que estimula el aprendizaje y la creatividad. Como genera una visión compartida, mejora la comunicación interna, facilita la integración, renueva la energía grupal y promueve la acción inmediata.
BIBLIOGRAFÍA:
Lo que sabe la gente feliz. Dr. Dan Baker/ Cameron Stauth
El Secreto. Rhonda Byrne.
Sara Morís González
Psicólogo y Coach en Gijón
www.psicologogijon.com
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